suelen hacerlo sin cobrar nada a cambio.
Son simpatizantes de un movimiento o quieren aportar a la sociedad,
suelen ser profesionales que dan sus servicios a empresas, pero que
en esta ocasión lo hacen sin pedir dinero.
La mercadotecnia social normalmente muestra a un
grupo de individuos las ventajas de participar en cierta causa. Por
ejemplo, un grupo dedicado a ayudar a las personas con Sida, podría
hacer una campaña para mostrarles a los demás los perjuicios de no
cuidarse y contraer esta enfermedad.
Las personas aprenden más con las historias, los
ejemplos, que con los conceptos. De hecho por eso ejemplifiqué el
concepto. De esta manera grupos e individuos reaccionarán y tomarán
acción en muchos casos. Si es así, la estrategia ha sido todo un
éxito y podemos decir que la campaña rindió frutos.
La mercadotecnia social es una parte muy
interesante de esta rama. Vale la pena conocerla, porque muchos
grupos tienen las mejores intenciones con la humanidad, pero no saben
cómo llevar su mensaje y conseguir adeptos. Y de esta manera el
marketing ayuda a cambiar el mundo para bien.